Sumar, Podemos e IU se manifiestan en Madrid contra el rearme y el gasto militar

En las últimas semanas, el debate sobre el aumento del gasto militar en España ha cobrado una gran relevancia, provocando reacciones contundentes por parte de diferentes sectores de la sociedad. El portavoz de Izquierda Unida, Enrique Santiago, ha manifestado su preocupación ante la posibilidad de que el Gobierno entre en una "espiral brutal de rearme", advirtiendo que un aumento del gasto hasta el 5 por ciento sería incompatible con la participación de su partido en el Ejecutivo. Esta afirmación destaca un punto crucial en el debate actual: la necesidad de priorizar los derechos sociales sobre los intereses de la industria armamentista.
La voz de la protesta ha resonado con fuerza durante las manifestaciones convocadas por diferentes asociaciones agrupadas en la Asamblea contra el rearme y la militarización. Durante estas movilizaciones, la eurodiputada de Sumar, Estrella Galán, argumentó que "más armas implican más miedo", enfatizando que la lógica del negocio de las armas beneficia únicamente a unos pocos en detrimento de la justicia social. Su defensa de un enfoque centrado en los derechos y la equidad resuena con la preocupación de muchos españoles que ven el incremento del gasto militar como un camino incierto que enfrenta a la sociedad en vez de unirla.
En este contexto, Irene Montero, eurodiputada de Podemos, ha expresado su temor de que el Gobierno acepte el incremento del gasto militar, recordando que ya se ha cumplido con el compromiso del 2 por ciento sin mayores objeciones. Su crítica se basa en el alarmante aumento de cerca de 10.500 millones de euros para el sector militar, que ha quedado evidenciado por los recortes en áreas cruciales como la educación. La realidad de un presupuesto que sacrifica lo social en nombre de la "seguridad" es una preocupación palpable entre los manifestantes.
Las pancartas que se vieron durante las manifestaciones, portando eslóganes como "ni rearme ni militarización, por la paz" y "di no a la OTAN, di no a la guerra", subrayan el clamor de la ciudadanía por una política que priorice la paz y el entendimiento entre naciones y clases. Este mensaje, cargado de esperanza, resuena no solo en España, sino en el contexto global donde los conflictos armados continúan generando sufrimiento y división.
La discusión sobre el gasto militar debe ser una invitación para reflexionar profundamente sobre qué tipo de sociedad queremos construir. Apostar por una defensa que se base en la justicia social, la educación, y el bienestar, en vez de en la acumulación de armas, es un reto que debemos afrontar juntos. En este camino, la voz de la ciudadanía es innegociable y debe ser escuchada con atención por aquellos que ocupan cargos de responsabilidad en el Gobierno. La paz y la justicia social son valores que, más que nunca, deben guiarnos hacia un futuro mejor.