Gobierno y Generalidad montan otra empresa pública para traspasar a Cataluña los trenes de cercanías

Los gobiernos socialistas de Madrid y Barcelona han aprobado la creación de la empresa "Rodalies de Catalunya" para gestionar la red ferroviaria de cercanías, resultado del acuerdo entre PSOE y ERC para la investidura de Pedro Sánchez. El traspaso fue negociado por el ministro Félix Bolaños y el líder de ERC, Oriol Junqueras, cumpliendo una reivindicación histórica del separatismo. Sin embargo, el proceso ha sido complicado debido a la presión de los sindicatos de Renfe y Adif, que rechazaban depender de la Generalidad.

Tras una huelga cercana a Semana Santa, se acordó formar la empresa con un capital social de dos millones de euros: el Estado tendrá el 50,1% y la Generalidad el 49,9%. La compañía comenzará a operar en enero en un contexto difícil, con frecuentes retrasos y conflictos laborales. El ministro Óscar Puente defendió el traspaso como un "paso decisivo" hacia una gobernanza compartida, garantizando que los trabajadores mantendrán sus condiciones.

La Generalidad tendrá el mando ejecutivo, aunque Renfe supervisará seguridad e infraestructuras. El consejo de administración incluirá cuatro representantes de Renfe y cinco de la Generalidad, más la presidencia, asegurando que la última palabra sea autonómica. La consejera Sílvia Paneque calificó el traspaso de "histórico", pero advirtió que las mejoras tardarán al menos tres años en notarse. Junqueras celebró el acuerdo en redes sociales, destacando que solo ERC asumió el reto de mejorar Rodalies. Puente subrayó que el Gobierno cumple sus compromisos políticos con ERC.